domingo, 21 de diciembre de 2014

Solsticio

Solsticio

Hoy 21 de Diciembre transitamos el día y la noche mas larga del año y con ello lo acompañan muchas tradiciones, celebraciones y rituales,
esta se conoce como Solsticio.

Mucha gente cree fervientemente que mientras tiene lugar el solsticio de verano se abre un portal que permite a seres propios de la mitología, como son los espíritus y las hadas, ingresen en nuestro mundo.

Algunos como la Iglesia Católica, aprovecharon de este término astronómico solar, la luz venciendo a la oscuridad y el nacimiento del sol, para inventarse que fue el día que Jesús nació y así sustituir la festividad pagana por una cristiana.

Otros;  invocar a fuerzas sobrenaturales para que concedan ciertos deseos y eliminen la negatividad del mundo.

Otros; creen que el hombre sólo puede llegar a la luz, a conectar con los dioses del Olimpo mediante una introspección, cruzando la puerta del inconsciente.

Otros; creen en sanaciones de enfermedades que sin explicación habitaban en sus cuerpo y solo en este día a través de análisis de sueño mediante la inducción a un estado alterado de conciencia, les eran reveladas las dolencias del paciente.

En fin, de una u otra forma, hoy transitamos este día, y como toda creencia, pues creo que en todo hay su punto positivo o negativo.

Por lo que me permito pensar en este día y en esa conexión e instrospección de nuestro ser, más allá de un ritual, sino en un estilo de vida que a diario y todos los días deberíamos analizar y analizarnos.

 Pienso en: la importancia de quemar; quemar mentiras, miedos, incomodidades de aquellas cosas que nos bloquean, aquellas que son repeticiones y que no nos dejan sanar las heridas, poder quemar aquellos resentimientos que más que recuerdos, hacen una carga en mis hombros y muchos de ellos ni son por lo vivido, sino por lo adquirido, son aquellas certezas que compramos en un principio de nuestros tiempos y nos dañan como dardos envenenados.

Poder elegir morir y renacer con el Sol.

Detenernos en los pequeños detalles, en las insignificancias de la vida, en eso que suma a nuestro espíritu y nos hace palpitar, en dejar fluir y no censurar ni amordazar sentimientos, en apreciar la distancia y la cercanía y amar a aquellos que, sin importar el lugar, nos guardan un campo en su corazón y nos permiten desahogarnos y acompañarnos sin necesidad de estar sentados a nuestro lado, apreciar a esos fantasmas silenciosos, pero que siempre están allí para hacer de una vida un más allá de un transitar.
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Este Solsticio, me permitiré escucharme A MI MISMA y aprender de mis voces (muchas mías y muchas de otros) pero que a veces sin darnos cuenta silenciamos, y al final termina siendo nuestra mejor compañía, pero también al escucharme, poder ser la voz y los pasos de otros que, siendo seres humanos, quedan en el olvido y en el silencio de los caminos.


No siempre la lluvia interna significa una tormenta dentro de nosotros, pero, Qué sería de nosotros sin esa lluvia?

Un abrazo en este día!!!



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