Lo que realmente me hace sufrir, no es la vida en sí, no es el camino que escojo, no es la máscara que decido ponerme cada día… lo que me hace sufrir es porque yo me lo he permitido, son mis expectativas respecto a ¿cómo debería ser el mundo o cómo debería actuar?
Aquella noche viví intensamente, disfruté tanto el ser puta, no creí que alguien me hiciera sentir que lo que hago tiene un valor mas allá que unos billetes.
Cada noche deseo que regrese, que me escoja y que me haga volver a sentir eso que nadie me hace sentir.
Sus palabras fueron tan tiernas. Nunca me habían dicho: ¿Qué quieres hacer? Los papeles se voltearon, siempre pongo las reglas y en un segundo, alguien botó todos mis argumentos y me hizo flaquear, mis expectativas se desvanecieron, lo que sería una noche de trabajo fue una noche de placer, y sí, lo sé! Eso no me es permitido, no puedo ceder a mis placeres, no puedo enamorarme de alguien con el que me paga para que lo satisfaga, pero él, fue todo en ese momento, supo hacer de mis temores una fortaleza, de mis angustias, un momento de tranquilidad.
Entonces, ¿Qué es lo que me puede dañar? ¿Mis pensamientos, mis emociones, las etiquetas, lo perfecto o lo imperfecto?
Si sufro es porque soy cruel conmigo misma, no porque la vida sea cruel… es porque tengo un concepto equivocado de lo que realmente es. Mi abuela me decía: lucha por ser feliz!!! Pero en la infelicidad encuentro más sorpresas y me reconozco como humana y aprendo a vivir sin esforzarme a no tener que cumplir las expectativas de los demás hacia mí. Si un bosque fuera solo puras rosas, ríos limpios, un sol reluciente y una suave lluvia, me perdería la belleza de los insectos, las serpientes, el diluvio.
No quiero pensar en que no vale la pena estar en un bosque, no quiero dejar pasar lo horrible que este puede ser, no tiene sentido pensar que todo sea perfecto, ya que en el fondo sé que encontraré lo que no quisiera, pero eso que no quiero es lo que me cubre para que la lluvia no me moje.
Simplemente debo aceptar las cosas como son, adaptarme a un mundo perfecto con todas mis imperfecciones.
Me pusieron la vida como un paquete completo, en el que hay amor y muerte, instantes imborrables y triunfos acompañados de fracasos, las burbujas perfectas no existen, todo es una ilusión creada en la cabeza de cada uno...
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